El miedo en la infancia es una respuesta a la ansiedad que provoca cierto estímulo específico en el niño. El miedo es muy habitual en la etapa de la infancia y suele estar presente en mayor o menor medida hasta los doce años de edad, por lo que no debemos preocuparnos excesivamente por ello. Podéis encontrar el artículo que hace referencia a este tema haciendo clic en el siguiente enlace: Los miedos en la Infancia.
¿Que son las fobias en la infancia? ¿Qué diferencia hay con los miedos infantiles?
Las fobias en la infancia son los miedos de un niño (miedo a un objeto o situación específica), que se convierten en desproporcionados y desadaptativos. Cuando un miedo llega a tomar estas características, lo denominamos fobia. Profundicemos un poco más…
- Desproporcionado. Significa que el objeto temido no entraña objetivamente ninguna amenaza para el niño, como por ejemplo la fobia a la oscuridad. La oscuridad en sí misma es inofensiva, sólo es la falta de luz en un lugar determinado. Si bien es cierto que pueden haber situaciones que podrían proporcionar efectos negativos, es considerable que el niño experimente cierto temor. Sin embargo, su reacción ante la situación u objeto al que se expone y teme es excesiva.
- Desadaptativo. Se trata del malestar que experimenta el niño debido a la elevada intensidad de la respuesta ante el objeto temido. La exposición al estímulo fóbico suscitará en el niño una respuesta inmediata de ansiedad que le causará alteraciones emocionales y una gran preocupación expresada través de gritos, llpros, búsqueda de la madre con abrazos, etc. También puede experimentar síntomas fisiológicos como náuseas, diarrea, desmayos, mareos, dolores de estómago, dolores de cabeza, etc.
Por lo tanto, para distinguir los miedos de las fobias en la infancia, debemos observar el comportamiento en la reacción del niño. Si es una conducta apropiada a las demandas de la situación, o si por el contrario, es una conducta alterada y exagerada. Si además de ser conductas inapropiadas, perduran un mínimo de seis meses, podremos llamarlo fobia en lugar de miedo.
Es importante mencionar aunque los adultos son conscientes de que el miedo es irracional y exagerado, en el caso de los niños, no es una premisa necesaria para diagnosticar una fobia en la infancia.
Las fobias más frecuentes en la infancia
- Fenómenos naturales
- Animales: arañas, ratones, serpientes, perros…
- Oscuridad
- Ruidos fuertes
- Enfermedades, sangre, heridas, inyecciones…
- Personas disfrazadas o extraños
- En la preadolescencia, fobias a vehículos y transportes públicos y aparecen casos de claustrofobia
¿Cómo afrontar las fobias en la infancia?
La fobias específicas, tanto en la infancia como en la vida adulta, pueden conllevar un problema para el desarrollo de la vida diaria de la persona con normalidad. Por lo tanto si un niño tiene una fobia, lo más adecuado para su propio bienestar, dadas las consecuencias emocionales que provoca el temor excesivo por un objeto o situación determinado, que puede encontrarse en la vida diaria de forma habitual, es intervenir.
La técnica más utilizada y que ha resultado ser más eficaz es la Técnica de Exposición. El objetivo es que el niño con fobia sea capaz de exponerse al estímulo fóbico con la menor ansiedad posible y sea capaz de adaptar sus reacciones. Se puede realizar la Exposición en vivo o en imágenes. La exposición en vivo es la más eficaz en sus resultados, pero no todas las fobias pueden exponerse en una situación real.
Para la fobia a volar en avión se realizará exposición en imágenes, con vídeos o imaginando la situación específica. No podrá realizarse una terapia en una situación real por el coste que conllevaría.
Para complementar la Técnica de Exposición, se realizan, en el caso que sea necesario, Técnicas de relajación para controlar los niveles de ansiedad que experimenta el niño ante el objeto o situación temida.
* Imagen de portada realizada por Victor Bezrukov
Psicología infantil