La dislalia es la incapacidad del niño para utilizar los sonidos de la lengua propios de su edad. Manifiestan una producción inadecuada de los sonidos del habla. De esta manera, el pequeño comete errores, distorsiones y omisiones al hablar. Suele presentarse entre los tres y los cinco años.
A modo orientativo, si un niño de tres años que empieza a ir a la escuela presenta errores fonéticos entra dentro de la normalidad dada su inmadurez en el lenguaje. A los cuatro años se considera normal que tenga ciertas dificultades con sonidos como la /r/ o la /s/. Pero con cinco años, el cuadro fonético ya debería estar adquirido. Es entonces cuando ya hablaríamos de un trastorno fonológico.
No articula algún sonido. Ejemplo: “patilla” en lugar de “zapatilla”.
Alteran el orden normal de la palabra. Ejemplo: “cocholate” en vez de “chocolate”.
Articulan un sonido en lugar de otro. Ejemplo: “ lata” en vez de “rata”.
Emiten un sonido inadecuado en la palabra. Ejemplo: “casa” en vez de “casia”.
Articulan un sonido aproximado. Ejemplo: “zaco” en vez de “saco”.
Para la denominación del fonema afectado, se utiliza una terminología derivada del nombre griego del fonema de que se trate, con la terminación “tismo” o “cismo”.
Así podemos decir que si el niño no es capaz de pronunciar la /z/ y pronuncia “caza” en vez de “casa”, tiene un ceceo.
Es necesario conocer los diferentes tipos de dislalia para conocer la causa del problema y la intervención que será más adecuada para cada caso.
Tiene lugar en la fase de desarrollo del lenguaje infantil, en la que el niño no es capaz de repetir por imitación las palabras que escucha y lo hace de forma incorrecta desde el punto de vista fonético.
Se caracteriza por un mal funcionamiento de los órganos articulatorios. El niño desconoce o realiza incorrectamente la articulación del fonema. No sabe hacer vibrar la lengua para pronunciar bien la RR, y suele reemplazar la S por la Z, o la R por la D.
El niño tenga dificultades para articular determinados fonemas por problemas orgánicos. Presentan alteraciones en el sistema nervioso central, tienen alguna malformación o anomalías en aparato fonador ( compuesto por órganos de respiración, fonación y articulación).
Se caracteriza por las dificultades originadas por problemas de audición. El niño es incapaz de pronunciar de forma correcta los fonemas porque no oye bien. En algunos casos, es necesario que los niños utilicen prótesis.
Psicología infantil
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