Grooming: el peligro de las redes sociales

El Grooming hace referencia a una serie de conductas y de acciones emprendidas por una persona adulta con la finalidad de ganarse la amistad de un menor de edad. El adulto que recibe el nombre de “groomer”, busca crear una conexión emocional con el menor con el fin de que éste se desinhiba y poder abusar sexualmente de él.

El grooming puede conllevar abuso sexual, prostitución infantil y producción de material pornográfico infantil, incitados por la persona adulta.

El proceso del grooming

El grooming puede durar entre semanas o meses, dependiendo de la relación que se establezca entre el adulto y el menor, de factores propios del menor (como su personalidad, carácter, situación actual que esté viviendo…), así como la regularidad de su contacto con el adulto.

Las cuatro fases del grooming son:

1. Creación del vínculo: La persona adulta empieza a crear vínculos emocionales con el menor, buscando amistad en él. En las redes sociales suelen hacerse pasar por menores.
2. Obtención de información: A medida que avanza la relación entre ambos, el adulto va obteniendo información sobre el menor cada vez más precisa.
3. Seducción y provocación: El adulto empieza a hacer uso de tácticas de seducción y provocación, enviando imágenes de contenido pornográfico, consiguiendo que el menor realice lo mismo y se desnude o lleve a cabo actos de índole sexual, como tocarse, etc.
4. Acoso y chantaje: En este punto se empieza ya con el acoso al menor, y el adulto chantajea emocionalmente al menor para que le proporcione más material pornográfico o puede solicitar un encuentro físico entre ambos para poder abusar sexualmente de él.

Vídeo campaña Movistar sobre el Grooming

Cómo evitar el Grooming

Lo primero y más importante es mantener una buena comunicación con el hijo o hija menor, con ello conseguiremos que se muestre abierto con nosotros y podremos hablar de aspectos más peliagudos que a algunos padres les cuesta de comentar con sus hijos. Es necesario normalizar las conversaciones, son aspectos y situaciones que están ahí, pero que pueden prevenirse.

En Internet Grooming se ofrece un decálogo completo para hacer frente al grooming y el acoso sexual de los menores. Algunas de las sugerencias que Internet grooming expone son:

• Preserva la seguridad y confidencialidad de cuentas de usuario y contraseñas.
• No cedas al chantaje bajo ninguna circunstancia, ya que esto supondrá aumentar la posición de fuerza del groomer.
• No proporciones o hagas accesible fácilmente a extraños, imágenes o información personal.
• Recopila pruebas de actividad delictiva como capturas de pantalla, mensajes e imágenes que puedan demostrar las acciones del groomer, así como su paradero.
• Pide ayuda a una persona de tu confianza si te encuentras en una situación delicada que conlleve un estrés emocional y te sientas vulnerable.

Con una buena comunicación podremos hablar con nuestro hijo sobre los riesgos de las redes sociales, y podremos tomar medidas de prevención y seguridad de navegación en Internet, lo que se conoce como “control parental”, sin que el niño se muestre disconforme y acepte que es por su bien y mostrándonos accesibles a que si observa alguna irregularidad nos lo cuente y acude en nuestra ayuda.

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