Conocemos como canastilla del bebé el conjunto de cosas que podría necesitar el bebé en sus primeros días, durante la estancia en el hospital, especialmente para evitar correntillas de última hora.
Normalmente, se aconseja que la canastilla de la madre y la canastilla del bebé, estén preparadas a los siete meses de embarazo, que es cuando empieza a ser más probable un parto prematuro. Habitualmente, para ir al hospital os piden cuatro puestas completas: Ropita interior, pijama, calcetines y gorrito.
¿Qué ropa necesitaré para preparar la Canastilla del bebé?
Bodies de algodón o conjunto de ranita y camiseta:
Tanto el body como el conjunto hacen la función de ropita interior. Los de recién nacido es importante que sean finitos de manguita larga, para que el bebé se adapte poco a poco al medio que le rodea; pero en adelante, ya los encontraréis de manguita corta o tirantes. además, tanto el body como la ranita, dejan sus piernecitas al aire.
Es importante que sean de algodón, puesto que la piel del bebé es muy delicada y este tejido natural es lo mejor para ella. La ventaja de la ranita en los primeros días, es que es muy fácil de quitar y poner y para unos papás inexpertos o desentrenados con un bebé recién nacido, al que hay que tratar con delicadeza, algo que sea sencillo de cambiar facilita el trabajo. En nuestro caso, no encontramos conjunto de ranita y camiseta para más allá de un mes. Normalmente, a partir del mes, más o menos y todo depende de lo grande que sea el recién nacido, encontraréis bodies, que resultan muy cómodos cuando hay que cambiar muchos pañales, puesto que no hay que quitarlos.
Los bodies son prácticos porque, al ser una sola pieza, solo hay que desabrochar los botones de la entrepierna. Además, veréis que cuando cogéis al pequeño, las camisetas de pijama o los jerséis y camisetas, tienden a subirse dejando sus riñones al aire. Yo tenía mucha manía por eso, así que con los bodies debajo el bebé estaba siempre cubierto. Por otro lado hay que tener en cuenta que son prendas que se suelen manchar mucho en las primeras semanas del bebé, así que os iría bien tener un buen surtido.
Pijamas y peleles:
Los pijamas y los peleles son básicamente lo mismo. La diferencia radica en que los pijamas tienen dos piezas y los peleles son solo una, suelen tener una hilera de botones por delante o en la entrepierna para poder abrirlo y cambiar el pañal fácilmente, también los hay con abertura a la espalda. Probad los que os sean más cómodos, pero hasta que no tengas al pequeño delante, no podrás comprobarlo. Los hay que cubren los pies y los hay que no.
Normalmente, en invierno suelen tener los pies tanto el pelele como el pijama, aunque en primavera ya se encuentran de algodón finitos y ya no siempre tienen pie. En el caso de que no lo tengan, siempre se puede poner un calcetín si aun hace fresco por la noche. En los primeros días es lo más cómodo para vestir al bebé, tanto para él como para vosotros. Hay que tener controlado en que época nacerá el bebé. Si os toca de cara al invierno, conviene que le busquéis pijamas o peleles más abrigaditos, los hay afelpados por dentro y los hay de terciopelo. Y si va de cara al verano, tal vez los primeros días debáis ponerle un pijama fino, pero en pocos días el niño tiene el mismo calor que tu, y si tu duermes en pijama de verano, él también. O incluso con un body de tirantes sería suficiente.
Calcetines y gorrito:
La muda completa los incluye, tanto en invierno como en verano. Los primeros días el bebé está adaptándose a su nuevo espacio. El gorrito y los calcetines colaboran a mantener la temperatura óptima en un recién nacido. Los protocolos en los hospitales ahora ya no incluyen siempre vestir al niño nada más nacer, sino que el cuerpo de la madre o el padre es suficiente para darles calor. No obstante, pasadas unas horas, ya lo podréis vestir y eso incluye el gorrito y los calcetines también. Tal vez os pidan manoplas, pero no siempre las recomiendan, ya que el bebé mueve bastante sus deditos y a veces le molesta tenerlas cubiertas. En el caso de nuestro hijo, le molestaba (y le molesta) muchísimo tener las manos cubiertas.
Baberos:
Normalmente, empiezan a necesitar el babero más adelante, pasadas unas semanas. Pero va bien tenerlo desde el principio, por si acaso. Los hay que son como un triángulo, más pequeños, que son ideales para niños chiquitines de pocas semanas. En adelante, ya buscarás los más grandes para cuando a los seis meses empiece con la introducción de otros alimentos a parte de la leche materna o bien, un poco antes si regurgita mucho. Antes de eso, con los triangulares vas bien, con los grandes, se ve más babero que bebé. ¡Pobres!
Arrullo:
Tal vez os pidan dos. El arrullo sirve para recogerle, envolverle y darle calorcito y cariñitos a un bebé bien pequeño. Normalmente es un tipo de mantita suave de forma cuadrada. Los hay de una fibra muy suave, los hay de lana o los hay incluso de toalla, que son más para el verano. Pero es importante tener un arrullo desde el primer día, porque a la salida del hospital, no podéis sacar al recién nacido sin él.
¿Qué utensilios de aseo debe incluir la Canastilla del bebé?
En la canastilla del bebé también se incluyen los utensilios de aseo. Es muy probable que no hagáis servir todo lo que os piden o todo lo que yo incluiré en esta lista, pero, al igual que con la ropita, más vale estar preparados para cualquier imprevisto.
Pañales:
Probablemente necesite de la primera talla, de 2 a 5 kg. ¡Muy raro sería que pesara más de 5 kg!
Toallitas:
Escoged unas que sean suaves, los recién nacidos tienen la piel extradelicada.
Cremita para el culete:
Hay muchísimas opciones en el mercado, en la farmacia pueden recomendarte. A mi me gusta la de Mustela y la de Bepanthol.
Esponja:
Hay unas que son naturales, les llaman Marinas y parecen ásperas en seco, pero una vez las mojas son súper suaves. Es casi seguro que no podáis bañar al bebé todavía, puesto que aún no se le habrá caído el ombligo, pero la piden porque aunque no lo bañéis podéis darle una pasadita con agua para limpiarle ya que sale un poco sucio del cuerpo de su mami.
Cremita para el cuerpo:
Es bueno hidratar su piel incluso tan pequeñito.
Cepillo para bebé:
Es un tipo de cepillo con las cerdas extra suaves, no sirve un cepillo cualquiera. Si el bebé tiene pelito, puedes cepillarle muy suavemente en diferentes direcciones, puesto que cuando nacen el pelo se les queda pegado a la cabeza, cuando le lavéis, después le cepilláis un poquito y el pelo se irá despegando. Yo he sido muy insistente con el cepillado del pelo, me ha parecido que así evitaría esa crostecita que se hace en la cabeza de algunos bebés. Seguramente no tenga nada que ver o depende mucho de la piel y el cabello del niño, pero creo que es bueno. Además les suele gustar, porque es una sensación agradable para ellos.
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